Electricidad: un servicio que te propone derechos y deberes

Al momento de rubricar un documento para la obtención de algún servicio, en este caso la electricidad, entras en un estado de compromiso. En este caso, el documento te vinculará con el suministro energético mientras residas en la vivienda. Es él estarán las condiciones o parámetros acordados con la compañía de luz: coste según la potencia de electricidad, mantenimiento, entre otras cosas.

Este documento implica una serie de derechos y deberes del consumidor, los cuales deben cumplirse ante cualquier eventualidad, ya sea el cambiar alguna tarifa o la instalación de alguna fuente de poder. Desde la liberación del mercado eléctrico, el cliente tiene la potestad de elegir la compañía y la tarifa que desee.

Por otro lado, su condición de consumidor le da el poder de realizar cualquier trámite y disfrutar del mejor servicio. Pero hay más información por conocer. A continuación, algunos derechos del consumidor de luz:

Elección libre

El cliente puede seleccionar en qué mercado quiere buscar un servicio de calidad: el mercado regulado o en el mercado libre de luz. Las comercializadoras de referencia, una de las más empleadas, ofrecen tarifas reguladas, que se caracteriza por tener un coste por el estado.

Tarifa a conveniencia

El usuario podrá escoger qué tarifa de luz contratar. Las comercializadoras de libre mercado incluyen descuentos y algunos beneficios extras.

Potencia adecuada

Una compañía no debe ofrecer una potencia contratada más alta que la necesaria. De esta manera, el recibo de luz saldría, mes a mes, a un precio fuera de alcance porque es el término fijo que hay que pagar por estar conectado a la red.

Titular y contador

Normalmente, el cambio de titular sucede cuando existe un cambio de piso o residencia o cuando se entra a un piso en condición de alquiler. En este sentido, es necesario tener instalado un contador de luz inteligente, solo así podrás el conteo y el coste de la luz.

Sé un titular responsable. El titular del contrato de luz debe cumplir con una serie de parámetros, como por ejemplo: respetar el compromiso de permanencia con la empresa, mantener en buenas condiciones las instalaciones eléctricas, no manipular los aparatos de medidas debido a que puede ocasionar algún accidente y cancelar las facturas a tiempo, así se evitará cualquier recargo o multa adicional.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *