Una cuestión que provoca grandes temores entre los propietarios de viviendas en alquiler, es tener que enfrentarse a un inquilino moroso. Aunque es cierto que este miedo no llega a ser paralizante, tampoco nos planteamos seriamente que nos podamos ver en semejante situación. Hemos invertido muchísimo tiempo en seleccionar a la persona que va a ocupar nuestra segunda vivienda localizada en Barcelona. Nos da la impresión de ser una persona seria y formal. Por tanto, es imposible que no nos pague.
Tras varios meses, te arrepientes de la elección que hiciste y solo quieres saber qué debes hacer para revertir esta situación. No te preocupes. Apialia Gaudí va a contarte todo lo que necesitas saber al respecto.
En primer lugar, vamos a diferenciar lo que es un atraso de un impago. Puede ocurrirte que, si tienes estipulado el pago entre el día 1 y 5 de cada mes, lo recibas el 6 o el 7. Antes de llevarte las manos a la cabeza y ponerle una etiqueta errónea, párate a observar cuándo se emitió la transferencia bancaria. Si te ha cogido un fin de semana por medio, puede que está se retrase por cuestiones propias del funcionamiento de las entidades bancarias.
En el caso de que no hayas recibido la cuota estipulada tras varios meses, es evidente que estamos ante una situación de impago. Por muy desagradable que sea, debes hablar con el inquilino y solicitarle por escrito el abono de la cantidad. Si no recibes respuesta positiva, deberás utilizar la vía judicial.
Al amparo de la ley, podrás solicitar que te abone el total que tiene pendiente o que se resuelva el contrato que habíais firmado, ejecutándose un desahucio. De este modo, conseguiremos que el inquilino abandone, en el menor tiempo posible, nuestra propiedad.
No obstante, debes saber que tiene la posibilidad de pagar lo que nos debe antes de que se celebre el juicio o, si estamos muy interesados en que se marche, también podemos perdonarle toda o parte de la deuda. Si llegados al día de la vista, no compareciese, se declarará automáticamente el desahucio y se fijará una fecha para ejecutarlo.