Claves para elegir la planta de tu vivienda en un edificio

Una de las dudas que puede surgir a la hora de comprar una vivienda es decidir cuál es la planta más adecuada.

Aunque siempre depende de nuestros propios gustos, lo cierto es que cada planta tiene sus propias ventajas e inconvenientes.

En Apialia Gaudí te damos las claves para elegir la planta de tu vivienda en un edificio.

La elección de una planta u otra no solamente depende de nuestro propio presupuesto sino del tipo de comprador y de nuestras propias circunstancias.

El ático: suele ser el inmueble preferido por parejas jóvenes o familias que quieren intimidad y poder disfrutar de espacio al aire libre, sin embargo, hay que contar con un buen presupuesto porque suelen ser los que tienen el precio más elevado.

Los pisos intermedios: son los menos demandados y pueden servir para cualquier tipo de cliente: familias, parejas o solteros, siempre y cuando, sean personas que no les importe relacionarse con vecinos, ya que al estar situados en una parte intermedia del edificio tendrán más relación con el resto de propietarios.

El primer piso: es de los menos deseados por la cercanía a la calle e incluso la posibilidad de que estén encima de un local comercial, sin embargo, suelen ser los más económicos y son los más accesibles en caso de estropearse el ascensor.

La planta baja: junto con el ático, es de las viviendas más solicitadas, sobre todo, para personas que tienen niños o mascotas, ya que por lo general cuentan con una parte de jardín o de patio.

Además de las características propias de cada tipo de planta, también hay que tener en cuenta que existe una diferencia económica entre todas ellas debido a factores como: la altura, la luz, la orientación, las vistas y la posición de cada tipo de inmueble.

En definitiva, es importante analizar pros y contras de cada una de las plantas, así como pedir asesoramiento para poder tener una idea más clara de cuál es la que más nos conviene.

Calefacción sostenible para ahorrar en invierno

Con la llegada del frío surge la necesidad de buscar sistemas de calefacción que nos ayuden a combatir la bajada de temperaturas, al tiempo que reducimos el consumo de energía para que no se disparen las facturas.

En Apialia Gaudí te explicamos los diferentes tipos de calefacción sostenible que puedes encontrar en el mercado para ahorrar en invierno.

Geotermia

Con la utilización de sistemas geotérmicos encontramos una forma de calentar el ambiente de manera ecológica y eficiente. Funcionan con calor extraído del subsuelo, por lo que necesitan menos energía para calentar el aire. El inconveniente es que precisa de una instalación cara, aunque esta inversión se recupera a largo plazo.

Aerotermia

Son sistemas que utilizan la termodinámica para calentar o enfriar espacios, al igual que ocurre con la geotermia su inversión inicial es uno de los principales inconvenientes, sin embargo, el hecho de que obtenga la mayoría de energía del aire y no de electricidad supone un gran ahorro.

Hidráulico

La calefacción hidráulica funciona distribuyendo agua caliente en tuberías instaladas debajo del suelo (suelo radiante) o en radiadores que pueden estar distribuidos por toda la vivienda. Funcionan mediante una caldera que utiliza electricidad o gas natural.

Energía solar

Se trata de uno de los sistemas más utilizados y sostenibles que también puede que necesite de una inversión inicial importante pero que a la larga, consigue ahorrar en la factura de la luz. La energía solar se puede implementar a través de colectores hidráulicos y de sistemas de aire, los primeros sirven para calentar el agua y los segundos son sistemas tradicionales de climatización.

Biomasa

Este tipo de calefacción funciona con estufas de pellets, muy similar a la estufa de leña, la diferencia es que los pellets son materiales respetuosos con el medio ambiente y también son económicos, asimismo, se trata de un tipo de calefacción muy fácil de instalar y muy económica.

 

Cédula de habitabilidad, ¿por qué es tan importante?

Dentro de la documentación que necesitamos para realizar una transacción de compraventa se incluye la cédula de habitabilidad, aunque la mayoría desconoce para qué sirve y cuál es su importancia.

En Apialia Gaudí te explicamos en qué consiste la cédula de habitabilidad y por qué es tan importante.

La cédula de habitabilidad es un documento que acredita que la vivienda cuenta con las condiciones básicas mínimas para poder habitarla. Este tipo de condiciones incluyen tanto requisitos técnicos que tiene que cumplir la edificación como algunas exigencias sanitarias e higiénicas mínimas.

Esto significa que el objetivo principal de esta documentación es garantizar que se puede entrar a vivir en ese inmueble en cualquier momento, asimismo, es necesario tener la cédula de habitabilidad para poder dar de alta los suministros de la vivienda: luz, agua y gas y además es obligatoria para poder vender o alquilar una vivienda.

Las comunidades autónomas son las entidades responsables de regular las células de habitabilidad y tienen que incluir la siguiente información:

  • La ubicación y dirección completa de la vivienda.
  • La superficie útil en metros cuadrados.
  • El número de habitaciones y espacios que confluyen en el interior de la vivienda.
  • Cuál es el umbral máximo de ocupación, es decir, el número de personas como máximo que pueden habitar esa vivienda cumpliendo la normativa.
  • La firma del técnico profesional que haya elaborado este certificado legal.

Las células de habitabilidad son diferentes dependiendo de la ocupación y existen tres tipos:

  • Cédula de habitabilidad de primera ocupación: es la que entrega el Ayuntamiento como administración local al promotor del inmueble.
  • Cédula de habitabilidad de primera ocupación por rehabilitación: se concede cuando se realiza una reforma importante en la vivienda.
  • Cédula de habitabilidad de segunda ocupación: es para viviendas ya construidas y que han sido habitadas anteriormente.

Normalmente, si solicitamos ayuda a una agencia inmobiliaria ellos se ocupan de gestionar y tramitar toda la documentación necesaria para la gestión de la compraventa.

 

 

¿En qué se diferencia un Personal Shopper Inmobiliario y un agente inmobiliario?

El sector inmobiliario lleva años profesionalizándose e intentando mejorar implementando procedimientos y personal que ayuden a mejorar la experiencia del cliente. Es por eso, que muchas agencias inmobiliarias ya incluyen el servicio de Personal Shopper inmobiliario, aunque hay personas que todavía no saben cuál es la diferencia de este profesional con respecto al asesor inmobiliario tradicional.

En Apialia Gaudí te aclaramos en qué se diferencia un personal shopper inmobiliario y un agente inmobiliario.

Diferencias en el tipo de trabajo

El trabajo de un agente inmobiliario se basa en la captación de propiedades, convenciendo a los propietarios para vender un inmueble y en conseguir compradores para esa cartera de propiedades.

El personal shopper inmobiliario se encarga de ayudar y asesorar a cualquier persona que esté interesada en comprarse una propiedad, por lo que su trabajo incluye diferentes fases del proceso de compra: la búsqueda de inmuebles que se ajusten a esas necesidades y características, el acompañamiento en las visitas, la negociación con respecto al vendedor, etc.

Diferencias con respecto a los objetivos

Un agente inmobiliario es un mediador entre vendedor y comprador para poder conseguir el objetivo de venta, sin embargo, se enfoca más en la parte vendedora, ya que es quien le encarga la venta del inmueble.

El personal shopper inmobiliario, por su parte, representa los intereses del comprador.

Esto significa que el agente inmobiliario tiene como objetivo vender el inmueble lo antes posible y al mejor precio, mientras que el personal shopper inmobiliario quiere conseguir que el comprador encuentre la casa más adecuada al precio más bajo posible.

Dependiendo de si eres parte compradora o vendedora tienes que tener en cuenta cuál es el profesional que mejor va a ocuparse de gestionar la transacción y en cualquiera de los casos, recibirás asesoramiento especializado y personalizado para poder conseguir el objetivo que te propongas.

¿Cuáles son las ventajas y características de las hipotecas para funcionarios?

Dentro de los diferentes tipos de hipotecas ofertadas, algunos bancos incluyen un producto específico para trabajadores del sector público, por eso, si trabajas en este sector puede ser interesante conocer cuáles son las características y ventajas que ofrecen.

En Apialia Gaudí te contamos cuáles son las ventajas y características de las hipotecas para funcionarios.

Uno de los perfiles más estables a la hora de poder solicitar una hipoteca es el de los funcionarios, ya que cuentan con una estabilidad laboral y económica importante y precisamente, este es uno de los requisitos más valorados por un banco a la hora de conceder dinero. Por eso, hay algunas entidades bancarias que ofrecen hipotecas específicas para este tipo de perfil.

Estas son algunas de las ventajas de las hipotecas para funcionarios:

  • Menos intereses: es una de las condiciones más atractivas de este tipo de hipoteca, tanto si es una hipoteca variable como fija, el precio del préstamo suele tener intereses más bajos.
  • Plazos de amortización más largos: que suelen llegar hasta los 40 años, cuando lo habitual es que un banco preste dinero como mucho a 30 o 35 años.
  • Poder solicitar más capital: ya que la seguridad de un trabajo estable y un salario fijo permite que las entidades bancarias presten más dinero a este colectivo.
  • Tienen menos comisiones: y en el caso de tenerlas, son mucho más baratas, como por ejemplo la de subrogación o la de novación y además tienen menos vinculaciones.

A pesar de todas estas características y de que cuentan con numerosas ventajas con respecto a hipotecas dirigidas a otro tipo de perfil de cliente, siempre es importante comparar, tanto entre diferentes bancos como con respecto a diferentes tipos de hipotecas en la misma entidad, ya que de esta manera, realmente encontraremos el producto que mejor se ajuste a nuestras necesidades.