Lo que debes saber sobre la rentabilidad en la compra y el alquiler de inmuebles

La inestabilidad económica enciende las alarmas de los inversores. Por eso, una de las posibilidades dentro del pensar común es la compra un piso para alquilar. Su elección es primordial, pues determinará qué tan lucrativa serán las ganancias. A continuación, algunos consejos para analizar la rentabilidad del alquiler:

Comprar y alquilar un piso

La primera idea que se plantea sobre la mesa es que a menor precio de compra, mayor rentabilidad. Esta proposición es totalmente falsa. Al momento de comprar, se debe tomar en cuenta la zona y la ciudad en cuestión, el precio estará determinado por las carencias o fortalezas del ambiente.

Por eso te recomendamos que no pierdas detalle alguno, evalúa todos los espacios físicos del inmueble. Cualquier falla, reducirá el valor en el mercado. Una vivienda barata no es necesariamente la mejor para invertir.

Tipología versus valor

Uno de los errores más frecuentes que comenten las personas que buscan alquilar un inmueble radica en pensar que las viviendas más pequeñas son las más rentables y de mayor demanda. Según análisis estadísticos, las tipologías más llamativas son aquellas que oscilan entre 180 y 250 m2.

Por otro lado, en la actualidad, la ubicación geográfica es un elemento trascendental para lograr la rentabilidad de una vivienda. Por ejemplo, en Madrid, no todo el centro recibe el visto bueno de los compradores. Existen pequeñas zonas en donde la rentabilidad del alquiler es irrisoria, casi alcanza el 3,7 %, mientras que en otras limítrofes, puede caer hasta el 2,1 %.

Calcular la rentabilidad de un alquiler

La dinámica del mercado no te permite cosechar datos en tiempo real en torno a la rentabilidad del alquiler. Pero, están establecidas fórmulas matemáticas que te permitirán obtener la renta total. En este sentido, se divide el dinero anual que se obtiene por el alquiler de la vivienda entre su precio de venta.

Por otra parte, es necesario mencionar que esta fórmula deja fuera una serie de gastos que también se deben tomar en cuenta, como la cuota de la comunidad de vecinos, los impuestos derivados de la renta, los posibles daños y perjuicios del inmueble, el seguro de la vivienda, entre otros gastos.

Rentabilidad ideal

Si se tienen en cuenta los diferentes escenarios financieros, la cifra puede variar. No es lo mismo el plazo fijo que el variable. No podemos dejar a un lado que existen gastos relacionados a la exhibición de la vivienda al alquilar, como el certificado energético, plasmado en las normas para comprar o alquilar.

Los especialistas consideran que la compra para el alquiler tiene un plus que enriquece el patrimonio, el valor aumentará al pasar los días. Por lo tanto, el ingreso en las cuentas bancarias será un acontecimiento tácito.

Eso sí, se le debe prestar mucha atención a las medidas políticas, ya que estas pueden influir en las decisiones de compra o venta. La legislación puede variar y afectar a los interesados. ¿Y tú? ¿Quieres vender o alquilar un inmueble?

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *