Cambios en los perfiles de las personas que optan por pisos de alquiler compartidos: analizando el nuevo tipo de demandante

En Cataluña, la opción de buscar un piso compartido de alquiler ha sido la opción más utilizada por los jóvenes. Generalmente, los estudiantes universitarios han sido los que más lo solicitaban, seguido de las personas que se trasladan a la localidad por motivos laborales. No obstante, en Apialia Gaudí hemos descubierto que el perfil medio ha cambiado, incrementándose la edad de los solicitantes y siendo más habitual encontrarnos con personas dentro de la treintena que buscan este tipo de convivencia.

La superación de esta franja ha sido causada por las dificultades tanto económicas como de inserción en el mundo laboral, que han existido en los últimos años. Esto ha provocado que las personas que terminaban sus estudios universitarios, tuvieran que permanecer en casa de sus progenitores hasta poder dar el salto hacia la independencia. Tal circunstancia ha motivado un cambio de mentalidad generalizado, estando mucho más dispuesto a variar su lugar de residencia con el fin de encontrar un trabajo. De modo que la mejor vía para minimizar los costes asociados es la de compartir piso.

Actualmente, la renta media que se abona por una habitación es de 330 euros. No obstante, en Barcelona el bastante superior, llegando a encontrarse cerca de los 500 euros. Esto ha provocado que muchos de los propietarios de inmuebles hayan optado por alquilarlos por habitaciones, con la finalidad de incrementar la rentabilidad. Todo ello, amparados por las dificultades que actualmente existe para encontrar inmuebles en alquiler y la alta demanda que se está generando en este sentido.

Aunque disponer de suficiente mobiliario y conexión a internet son elementos ampliamente valorados por los inquilinos, no todos los propietarios los ofertan. De hecho, las características de las habitaciones que nos encontramos en alquiler son muy variadas, si bien es cierto que este perfil de consumidor se adapta fácilmente y termina personificando su habitación a su gusto.

En cuanto a las posibles diferencias por género, apreciamos que, tanto hombres como mujeres, han incrementado su demanda de este tipo de espacios.

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