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La internacionalización se refiere a la capacidad de cualquier compañía de desarrollar una parte de su actividad en otro país diferente al país de origen.

En el caso de hablar de la internacionalización inmobiliaria, esta actividad empresarial consistiría en poder captar inversores extranjeros mediante un proceso de internacionalización de compraventa.

Aunque se trata de un proceso gradual y que requiere tiempo, también hay que estar dispuestos a asumir cambios en el funcionamiento tanto de la compañía, como de la estructura y en la manera de operar.

Para poder internacionalizar una agencia inmobiliaria hay que profundizar en la cultura y los procedimientos del país donde se vaya a operar, de manera que se conozca a los clientes potenciales y se puedan culminar las transacciones, y uno de los primeros pasos que hay que realizar para internacionalizar una agencia inmobiliaria es crear relaciones y sinergias con otros agentes inmobiliarios de otros países, de manera que nos encontremos con profesionales preparados y formados que puedan abrirse camino en diferentes idiomas.

En Apialia Gaudí te contamos cuáles son las ventajas de internacionalizar una agencia inmobiliaria.

Dentro las principales ventajas que supone internacionalizar una agencia inmobiliaria,  además de atraer a nuevos compradores en el exterior son:

Compensar el mercado interno.

• Incrementar y expandir la cartera de clientes.
• Crear una diversificación de los mercados y de los riesgos.
• Posibilidad de consolidar la marca.
• Mejorar la capacidad productiva y financiera.
• Invertir en la mejora de la calidad de los servicios.

Internacionalizar una agencia inmobiliaria es una solución para reponerse a la crisis post-covid, así como para ampliar el mercado e incrementar las operaciones de compraventa.

Lo más importante es contar con apoyo de profesionales que hayan podido experimentar un proceso similar y que puedan ayudarte con información sobre todos los aspectos relevantes del país en donde decidas internacionalizar tu agencia inmobiliaria.

Tanto si eres propietario de una plaza de garaje y quieres sacar rentabilidad como si necesitas alquilar un aparcamiento, es importante conocer ciertos aspectos incluyendo el tipo de contrato que hay que realizar para evitar sorpresas.

En Apialia Gaudí te explicamos todo lo que tienes que saber para alquilar una plaza de garaje.

La normativa que rige el alquiler de una plaza de garaje es el Código Civil, ya que se considera un arrendamiento diferente al de una vivienda. En particular, los artículos del 1546 en 1582 de este Código establecen que la duración del contrato de alquiler de una plaza de garaje estará estipulado por ambas partes en el propio contrato y el dueño tendrá que avisar previamente al inquilino antes de la fecha en la que debe abandonar el aparcamiento.

Si eres propietario, conviene saber que una vez formalizado el contrato de alquiler de la plaza de garaje habrá que ingresar el 21% del IVA en Hacienda, por lo que las facturas tendrán que contener este porcentaje que abonará el inquilino. Sin embargo, si se trata de un anexo de una vivienda o residencia, la operación estará exenta de tributación.

No obstante, conviene especificar bien esto en el contrato porque las sanciones recaerán sobre el arrendador.

En el caso de realizar un contrato verbal, existe la posibilidad de realizarlo de manera mensual o anual, dependiendo de cómo se pague la renta. Pero en este supuesto, es importante que el arrendador tenga los datos personales del inquilino porque si se niega a abandonar de forma voluntaria el garaje, tendrá que hacerse mediante una comunicación fehaciente.

Lo más conveniente siempre es redactar y firmar un contrato de alquiler de una plaza de garaje para evitar problemas y tener ciertas garantías, para ello, se puede buscar un modelo de contrato de alquiler o realizarlo a través de profesionales que puedan ayudarte a redactarlo.

La seguridad en una vivienda es algo fundamental y no solo cuando estamos dentro sino sobre todo, en el momento en que salimos de casa y en particular, en viviendas que tenemos como segunda residencia y que pasan la mayor parte del año vacías.

En Apialia Gaudí te contamos cuáles son las tecnologías que pueden ayudar a mejorar la seguridad en el hogar.

La tecnología avanza continuamente y hoy en día, existen numerosos dispositivos altamente eficaces que ayudan a mantener la seguridad en una vivienda entre los que se encuentran:

Reconocimiento facial

Las cámaras de seguridad están empezando a evolucionar gracias a la Inteligencia Artificial para incluir el reconocimiento facial y alertar de la presencia de personas desconocidas.

Paneles de control

Las empresas de seguridad incluyen la posibilidad de poder desplazarnos con un panel de control de seguridad para poder comunicarnos con los especialistas en seguridad cuando hay intrusos en la vivienda y estamos dentro.

Llaves electrónicas de seguridad

Hoy en día, las alarmas funcionan con llaves electrónicas que además están encriptadas para que no se puedan duplicar y que evitan equivocaciones con el código de seguridad.

Cerraduras electrónicas

Con la cerradura electrónica se conecta la alarma y se reciben órdenes de manera remota para abrir o cerrar puertas.

Dispositivos anti-inhibición

Para evitar que los ladrones utilicen dispositivos para inhibir alarmas, el mercado ha creado unos aparatos anti-inhibición.

Dispositivos de manos libres

La tecnología está empezando a diseñar dispositivos de manos libres para que la alarma detecte a distancia nuestra llegada y se abra la puerta.

Dispositivos con humo

Se trata de un dispositivo que genera un humo denso y molesto que quita  visibilidad impidiendo que el intruso pueda robar o incluso que retenga al ladrón hasta que venga la policía.

Sensores en puertas y ventanas

Gracias a estos sensores de vibración colocados en puertas y ventanas se puede detectar a un intruso antes de que entre.

Detectores de movimiento

Especialmente indicados para espacios exteriores que permanecen activados y alertan de cualquier intrusión.

Dispositivos para senior

Existen dispositivos específicos y adaptados para las personas mayores que necesitan una ayuda extra con el objetivo de poder incrementar su nivel de seguridad y bienestar en el hogar.

El año 2021 estuvo marcado por un récord en cuanto a las herencias de vivienda, en parte, marcado por una tendencia demográfica en nuestro país y por otro lado, por el número de fallecidos a causa de la pandemia del coronavirus, por eso, hay numerosas personas que se encuentran ante la duda de cómo gestionar el proceso.

En Apialia Gaudí te explicamos cuáles son los impuestos que hay que pagar al heredar un inmueble

Lo primero que hay que saber una vez que hemos heredado un inmueble es adónde acudir. Lo más habitual es realizar el proceso en una notaría pero también existen agencias  inmobiliarias especializadas que se encargan de todo el proceso de la herencia de una vivienda e incluyen la posibilidad de venderla una vez que se ha gestionado el proceso.

El tiempo medio en el que se puede realizar este procedimiento depende de factores  como la existencia o no de testamento y el consenso o no de los herederos, siendo esto último lo que provoca mayores retrasos en el procedimiento de la herencia.

En cualquier caso, conviene saber cuáles son los gastos y los impuestos que hay que asumir:

Impuesto de Sucesiones

Es el impuesto aplicado a la transmisión de bienes y derechos entre personas físicas y su cuantía depende de cuánto se hereda y de las diferentes bonificaciones que se aplican en cada comunidad autónoma.

Los herederos cuentan con un margen de seis meses desde el momento del fallecimiento, que pueden ser prorrogables otros seis meses más con un coste adicional para abonar este impuesto.

Plusvalía municipal

Es el impuesto que grava el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana y en este caso se tiene en cuenta el valor catastral. También existe un plazo de seis meses para pagarlo, teniendo en cuenta que hay sanciones por impago que oscilan entre el 50% y el 150 % de la cantidad resultante dependiendo de la gravedad de la infracción.

Junto con estos impuestos, hay que tener en cuenta los gastos de notaría, los gastos fiscales o los gastos del Registro de la Propiedad.

En el momento en que nos decidimos a realizar cualquier tipo de reforma en nuestra vivienda, es importante informarnos en el Ayuntamiento correspondiente, ya que para cualquier cambio que vayamos a realizar en nuestro inmueble hay que solicitar un permiso de obras.

Existen dos tipos de licencias principales: licencias de obra mayor y licencias de obra menor, cuya diferencia principal depende del tipo de trabajo que se vaya a realizar.

En Apialia Gaudí te explicamos cuáles son las principales diferencias entre la obra mayor y la obra menor.

Licencias de obra mayor

Una obra mayor se considera un proyecto que tiene una cierta complejidad técnica y constructiva, por lo tanto, se trata de unos trabajos o reformas que requieren de una documentación técnica que debe realizar un profesional y que debe estar controlada por el Colegio de Arquitectos.

Los trabajos principales que requieren de un permiso de licencias de obra mayor son:

• Cualquier reforma tanto parcial como total que requiera cambios en la estructura.
• Trabajos para ampliación de volumen o altura.
• Obras de nueva planta.
• Rehabilitación integral.

Licencias de obra menor

Las licencias de obra menor se solicitan para realizar trabajos técnicamente menos complejos y más económicos que no necesitan de proyecto técnico.

Los trabajos para los que se necesita un permiso de licencia de obra menor son:

• Reformas o cambios en instalaciones de fontanería, electricidad y/o calefacción.
• Cualquier reforma interior parcial en la que no haya modificaciones en la estructura del inmueble.
• Cualquier trabajo relacionado con la renovación y reparación o ciertas modificaciones como el suelo, el techo, las paredes o la escayola.

La diferencia principal entre una licencia de obra mayor y la licencia de obra menor radica, por tanto, en que en la de obra mayor, hay cambios en la estructura del inmueble.

El pasado 30 de marzo entró en vigor el Real Decreto Ley 6/2022, que limita al Índice de Garantía de Competitividad la subida máxima de los precios en un contrato de alquiler. Cuya limitación se aplicará a aquellos contratos en los que se cumplan anualidad con fecha del 31 de marzo del 2022.

Esta medida conseguirá evitar que se aplique el IPC (Índice de Precios al Consumo) en la actualización de los precios del alquiler.

En Apialia Gaudí te contamos cómo afecta el IPC al precio del alquiler.

Lo más importante que debe tener en cuenta el arrendatario, es que la subida del precio del alquiler solo se puede realizar de forma anual en la fecha en la que se cumpla el contrato, por eso, conviene revisar las cláusulas si se cumple la anualidad en estos meses para determinar cuál va a ser la normativa aplicable, ya que lo más común es que la renta se actualice con el IPC.

La actualización del precio de la renta se realiza al mes siguiente de que el propietario se lo haya comunicado al inquilino, por tanto, en el caso de que se haya vencido el año y el propietario lo comunique meses más tarde, no tendrá derecho a exigir los atrasos.

Por otro lado, si en el contrato aparece la actualización de las rentas y el IPC es negativo también se actualizará el precio a la baja.

En el caso de que el contrato no contenga ninguna cláusula que contemple la actualización de la renta con el IPC, esta subida dependerá de la fecha de firma del contrato.

Para evitar problemas y que queden claros todos los términos con respecto a la actualización de la renta en un contrato de alquiler, siempre es conveniente realizar el contrato con asesoramiento profesional.

Independientemente del gusto personal de cada uno con respecto al tipo de vivienda que se busque, existen ciertos factores objetivos que se tienen en cuenta a la hora de elegir un inmueble.

Asimismo, el hecho de haber pasado por un confinamiento, hace que a valores tradicionales como la ubicación y el precio, se incluyan otros aspectos importantes.

En Apialia Gaudí te contamos cuáles son los factores más valorados a la hora de elegir una vivienda.

Precio

En primer lugar, y una vez que se ha analizado el presupuesto, el precio influye directamente a la hora de buscar un inmueble.

Ubicación y orientación

Con el presupuesto analizado, la ubicación se convierte en el segundo factor más importante a la hora de elegir un hogar, no solo con respecto al barrio y la zona donde se quiere vivir sino también analizando aspectos como los servicios disponibles en los alrededores. Por otro lado, la orientación también influye, ya que una buena orientación supone más luz natural y menos gasto en electricidad.

Características: espacio y exterior

En la actualidad, y tras haber vivido un confinamiento han variado un poco las características que se buscan en una vivienda,  y ahora se tiene mucho más en cuenta viviendas más grandes, con espacios versátiles que se puedan adaptar a las necesidades de la familia, sobretodo estancias que puedan ser utilizadas para teletrabajar, que sean viviendas con buenas calidades y que tengan vistas y aquí entra en juego la necesidad de que tengan espacios exteriores, como terrazas o balcones.

Estas nuevas preferencias provocan que los compradores de hoy prefieran buscar viviendas unifamiliares o chalets donde puedan encontrar todas estas características.

Sostenibilidad y eficiencia energética

Otro de los puntos importantes en la actualidad es la búsqueda de viviendas que cuenten con una buena eficiencia energética, en parte por la creciente preocupación de estar mucho más concienciados con el medio ambiente, y en parte por el ahorro en las facturas, sobre todo teniendo en cuenta el incremento de los precios tanto en la luz como en el gas.

Aunque las hipotecas fijas y variables son las más habituales en el mercado financiero, las entidades bancarias cuentan con numerosos tipos de financiación que conviene conocer, es el caso de las hipotecas verdes.

En Apialia Gaudí te contamos qué es y cómo conseguir la hipoteca que cuida el medio ambiente.

La preocupación por el medio ambiente es una realidad en todos los ámbitos de la vida, incluso en el ámbito hipotecario, por eso, algunos bancos cuentan con una hipoteca que premia la eficiencia energética y que ofrece condiciones mucho más ventajosas a las personas que quieran comprar una vivienda que cuente con una buena calificación energética.

La Hipoteca Verde, por lo tanto, es un préstamo hipotecario para comprar, construir o rehabilitar viviendas sostenibles. Por eso, uno de los requisitos indispensables para poder solicitarlo es que la vivienda tenga una calificación energética A o A+, y en el caso de rehabilitar, una vez terminada la reforma tendríamos que alcanzar ese nivel de eficiencia.

Para poder conocer la calificación energética de un inmueble hay que solicitar el certificado de eficiencia energética, que es el documento que acredita el consumo energético del inmueble, así como la emisión de gases.

Además del requisito de la eficiencia energética para obtener esta hipoteca, hay que contar con los mismos requisitos que se suelen solicitar para cualquier otra hipoteca: ahorros suficientes para hacer frente a los gastos de compraventa y la parte que no nos va a financiar el banco, trabajo estable con un buen sueldo, un buen historial crediticio, etc.

Si el solicitante reúne todos estos requisitos, se puede beneficiar de las ventajas que ofrece una Hipoteca Verde, entre las que se encuentran: la posibilidad de obtener un mejor tipo de interés cuanto más eficiente sea la vivienda y unas condiciones de financiación más atractivas.

No obstante, siempre es recomendable consultar las condiciones en varias entidades bancarias, así como informarse de las condiciones de otro tipo de hipotecas convencionales, con el objetivo de encontrar el mejor préstamo posible.

Contar con espacio de almacenaje se ha convertido en un lujo, sobre todo en pisos más pequeños donde se van acumulando las cosas de toda la familia y no hay espacio para guardar.

Por eso, si quieres invertir en un negocio rentable que no necesita demasiada inversión, igual es el momento de plantearte el alquiler de trasteros.

En Apialia Gaudí te contamos cómo se puede rentabilizar un trastero.

El modelo de negocio del alquiler de trasteros aterrizó en nuestro país en los años 80, sin embargo, hasta hace escasamente una década no es cuando ha empezado a despegar, sobre todo por el encarecimiento de la vivienda que ha provocado que las personas compren pisos más pequeños.

Si quieres invertir en el self storage, es importante que tengas en cuenta algunos aspectos para poder triunfar y sacar una buena rentabilidad al negocio.

Ubicación

Como ocurre con cualquier tipo de inmueble, un local para trasteros también tiene que tener muy en cuenta la ubicación, ya que lo ideal es que esté cercano a una zona residencial, que tenga fácil acceso y al mismo tiempo espacio suficiente como para poder tener varios espacios de almacenamiento. Asimismo, conviene que sea un lugar con facilidad de aparcamiento e incluso que cuente con un lugar cercano de carga y descarga.

Buen diseño

No se trata de gastar demasiado dinero en el diseño pero sí que el negocio debe dar una imagen lo suficientemente buena como para que los clientes se decidan a almacenar bienes preciados en estos trasteros.

Seguridad y servicios

La seguridad forma una parte bastante importante de estos espacios y los clientes tienen que tener garantizado que sus bienes van a estar bien preservados y guardados, por eso, es necesario invertir en seguridad y en servicios de alarma.

Dentro de los servicios principales se puede optar por el servicio telefónico o presencial y hay que diseñar un plan con tarifas, para ello habrá que tener diferentes tamaños para ofrecer diferentes modalidades de espacio de almacenaje, horarios de uso, etc.

Una vez concretado todo esto, según los expertos, el retorno de inversión del negocio de los trasteros tiene una media de entre un 5% y un 7%, por lo que un plantearse este tipo de inversión puede resultar bastante rentable.

La publicidad es fundamental para poder conseguir la venta de cualquier producto, en el caso de un inmueble, y teniendo en cuenta la competencia existente, conviene conocer ciertas estrategias y aspectos fundamentales para poder redactar un buen anuncio que llame la atención de los compradores.

En Apialia Gaudí te damos las claves de todo lo que debes incluir en un anuncio para vender antes tu inmueble.

Una imagen vale más que mil palabras

Es fundamental realizar un buen reportaje fotográfico para captar lo mejor del inmueble y es imprescindible que sean fotos de calidad y a ser posible, incluir vídeos o incluso un tour virtual.

Un buen titular

El titular además de incluir un breve resumen de las características principales de la vivienda, tiene que resultar atractivo para llamar la atención de los potenciales compradores. En este sentido, es importante, por ejemplo, incluir si el inmueble cuenta con vistas espectaculares, destaca por su ubicación o simplemente se trata de algún lugar exclusivo o con servicios específicos.

Descripción detallada y redacción perfecta

La descripción tiene que ser lo más detallada posible, con la información más específica de la vivienda, que incluya: la ubicación, el precio, el tipo de inmueble, el piso y la altura, los metros cuadrados y el número de estancias, cuál es el estado del inmueble, si cuenta con servicios, la antigüedad y el certificado energético.

Es imprescindible que tenga una redacción perfecta, sin faltas de ortografía.  Es preferible ser objetivo con respecto a la descripción y las cualidades de la vivienda, así como personalizar la descripción.

Si aún con estas claves no te ves capaz de escribir un anuncio que consiga captar la atención de compradores potenciales, siempre puedes acudir a una agencia inmobiliaria para que sus expertos profesionales pongan a tu servicio sus conocimientos de marketing y te ayuden a redactar un buen anuncio, además de publicitar tu inmueble en los mejores portales inmobiliarios y multiplicar así las posibilidades de venta.